Hogar de Menores / CEBRA

Arquitectos: CEBRA; CEBRA
Área: 1500 m²
Año: 2014
Fotografías:Mikkel Frost
Proveedores: Troldtekt

Curado por ArchDaily

Descripción enviada por el equipo del proyecto. NUESTRA CASA - EL HOGAR DE NIÑOS DEL FUTURO

El estudio de arquitectura danés CEBRA ha completado un proyecto pionero de un nuevo tipo de centro de atención durante las 24 horas para los niños y adolescentes marginados en Kerteminde, Dinamarca. El edificio revestido de azulejos y madera juega con elementos y formas familiares para crear un ambiente acogedor en un edificio moderno que se centra en las necesidades especiales de los residentes. El Hogar de Niños del Futuro combina el ambiente seguro de la casa tradicional con las nuevas ideas pedagógicas y concepciones de lo que un hogar de niños moderno es y con lo que debe cumplir.

La visión para la nueva institución es establecer un centro de atención que fomenta las relaciones sociales y un sentido de comunidad, pero también acomodar las necesidades individuales de los niños - un lugar del cual se sientan orgullosos de llamar su casa y los prepara para su futuro camino en la vida de la mejor manera posible. Los alrededores físicos reflejan un enfoque pedagógico orientado a la práctica de modo que la arquitectura apoya activamente el trabajo diario del personal con los niños, que luchan con problemas de salud mental y social.

Un lugar como en casa

Si nos fijamos en los dibujos infantiles o el icono estilizado de un navegador web, en todas las edades reconocemos y utilizamos el edificio con techo de dos aguas rectangular con una chimenea como el signo de "casa". Es la esencia visual de las funciones que contiene - en sentido literal y simbólico. El diseño para el hogar de niños toma las formas básicas familiares de la casa típica danesa como punto de partida natural: la clásica casa con techo de dos aguas y la buhardilla. Los dos elementos se utilizan en su forma más simplificada para crear una apariencia exterior reconocible e integrar el edificio en la zona residencial circundante. Ellos conforman el ADN de la arquitectura subyacente del proyecto, que expresa la inclusión, la diversidad y un ambiente de seguridad.

Al combinar y aplicar los elementos básicos de una forma nueva y lúdica, el centro de atención se destaca como un lugar extraordinario con su propia identidad. La forma geométrica de base es modificada por los perfiles distintivos de buhardilla, que crecen dentro y fuera del volumen del edificio, está al revés e incluso se levanta para formar un punto de vista. El concepto añade variación espacial y flexibilidad funcional a la organización interior. Las buhardillas dan a los residentes la oportunidad de crear su propia marca en el edificio mediante su participación en el acuerdo, la decoración y el uso de estos "espacios de bonificación", de acuerdo a las diversas necesidades y cambio de actividades. Los tamaños y orientaciones diferentes permiten una amplia gama de aplicaciones tales como la lectura y rincones de películas, un estudio para hacer las tareas, áreas de pintura y artesanía, salas comunes para actos festivos, etc.

Más hogar, menos institución

La organización general consta de cuatro casas interconectadas. Las alas alargadas del edificio institucional tradicional se separaron y comprimieron para formar un edificio compacto con volúmenes de compensación. De este modo, la escala de la construcción se reduce y se vuelve autónoma, con diferentes unidades que se crean para los diferentes grupos de residentes. Cada grupo de edad tiene su propia casa en relación con una unidad central para un uso flexible. La disposición tiene por objeto proporcionar a los residentes con un sentido de pertenencia a su unidad - un lugar acogedor donde puedan retirarse en soledad o en grupos más pequeños.

Las unidades de los niños más pequeños se retraen desde la calle y son orientadas hacia el jardín con acceso directo a la zona de juegos. La unidad central contiene la entrada principal en relación con el estacionamiento, lo que da al personal una visión general de los visitantes que llegan y entregan sin afectar a las unidades de vivienda. La unidad de los adolescentes es la sección más extrovertida del edificio y está orientada hacia la calle. Se alienta a los residentes mayores a usar la ciudad y participar en actividades sociales en igualdad de condiciones con sus compañeros.

Las típicas funciones institucionales, como la administración, habitaciones y almacenamiento del personal se encuentran principalmente en el sótano y en la primera planta para que puedan obtener una visión "elevada" de la vida cotidiana de los residentes y reducir al mínimo la sensación de estar en una institución. La organización racional del edificio asegura distancias cortas y la proximidad entre las distintas unidades para que el personal siempre esté cerca de todos los residentes. Por lo tanto, los procedimientos de trabajo del personal se incorporan de manera efectiva en las rutinas diarias, liberando así más tiempo para cuidar y pasar tiempo con los niños - más en casa, menos institución.